Actitudes en el entorno laboral

Combina los componentes Cognitivo, de comportamiento y afectivo (sentimental). Se requiere de inteligencia emocional para que la parte afectiva sepa ser controlada y  no llegar vulnerable al sitio de trabajo, ya que se espera toda la responsabilidad y capacidad técnico y/o profesional de la persona.

En la parte cognitiva se espera una fácil adaptación del colaborador en el ambiente, generando un buen ritmo de trabajo, con un alto índice de eficiencia. El comportamiento, es muy importante ya que a nivel gerencial y administrativo se observa al colaborador para determinar que tan funcional es y que tan aplicado en su labor puede llegar a ser.

El clima laboral que se produce gracias a la combinación de varios factores y que en su nivel optimo, lo que hace es tener colaboradores (empleados) felices.  Todo esto se marca en dos posturas en la actitudes laboral, la actitud positiva y la actitud negativa.

La positiva es propia de quienes aman su sitio de trabajo, gusta de lo que hacen y no se sienten incómodos porque no sienten desprecio por su labor y desempeño, siempre buscan mas, unos ejemplos de actitud positiva: «Me gusta trabajar aquí», «existe algo sentimental en la empresa que me compromete con ella».

La actitud negativa, es todo ese poder destructivo que no deja progresar y destruye todo el entorno que tenemos, por muy amable que pueda ser. Ejemplos: «prefiero buscar otro trabajo que esto», » me conformo con eso porque es lo único que hay».

los tipos de actitud en el trabajo se resumen en
– Satisfacción en el trabajo: Conjunto de reacciones favorables hacia la empresa, compañeros y demás, de parte de la persona trabajadora.
-Involucramiento con el trabajo: Grado de compromiso del trabajador con su labor, y el optimo desempeño en esta.
-Compromiso organizacional: Sentido de pertenencia por la empresa.

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